Su nombre científico es “Mustela Putorius furo” y desciende del turón, ambos pertenecen a la familia de los mustélidos. Antiguamente, se usaban para la caza de conejos, lo que hoy en día está prohibido.
Mide entre 45 y 65 cm, y su peso varía entre 500-1500 gramos, aunque en ocasiones llegan a los 2500 gramos, siendo las hembras más pequeñas. No hay diferentes razas, pero su pelaje si es variable. Viven entre 6 y 10 años, pero algunos han llegado a 12.
Son juguetones, traviesos, cariñosos, inquietos y muy inteligentes por lo que pueden aprender trucos.
En cuanto al color de su pelaje podremos ver: albino, siamese, sable mitt, sable mask, panda, marked white, cinnamon, chocolate, blaze y black eyed white, siendo el más común el sable. El color de un hurón no está relacionado con su carácter pero determinadas variedades de color son susceptibles a desarrollar determinadas enfermedades.
A tener en cuenta...
- Los hurones tienen un carácter similar al de los gatos, pueden ser independientes y morder, por lo que es mejor que los niños no lo cojan ya que podrían hacerle daño y reaccionar mal.
- Los hurones tienen un olor característico por sus glándulas perianales, aunque se puede disminuir éste olor extirpándole las glándulas, es imposible hacerlo desaparecer.
- Los machos no castrados huelen más fuerte que las hembras.
- Debemos adquirir el hurón con una edad de 3 meses, nunca menos de 10 semanas.
El mejor sitio para él será una jaula metálica amplia, debe tener un comedero difícil de volcar, un bebedero tipo botella, una cesta para dormir y un arenero con arena de gato. Nunca se debe utilizar serrín o viruta de madera, ya que puede provocarles problemas respiratorios y alérgicos, en especial la viruta o serrín de coníferas. La temperatura ideal para el hurón será entre los 18º y 22º C.
El hurón necesita hacer ejercicio, por lo que debemos soltarlo por la habitación y tener cuidado con las grietas, agujeros y rejillas de ventilación, ya que puede pasar por agujeros muy pequeños. También debemos tener cuidado si tenemos más animales en casa porque pueden pelearse. Algunos pueden morder los cables eléctricos, arañar las alfombras o tragar objetos pequeños, por lo que hay que mantenerlos vigilados.
El apareamiento es violento, ya que el macho muerde a la hembra en la nuca durante la cópula, y puede llegar a causarle heridas importantes. La gestación de la hembra es de 42 días, al nacer las crías pesan alrededor de 10 gramos y están cubiertas por un pelo sedoso, su independencia se da entre 10 y 12 semanas.
Tenemos que darle especial importancia al “Hiperestrogenismo” en las hembras, enfermedad muy común que aparece en el 100% de las hembras no castradas, con síntomas como la caída del pelo de forma simétrica empezando por la cola y avanzando por el resto del cuerpo, así como la hinchazón de la vulva.
Los hurones son carnívoros por lo que necesitan en su dieta un 30-35% de proteína de origen animal y un 15-20% de grasa. El pienso para gatitos de alta calidad es una de las opciones más comunes hasta los 3 ó 4 años de edad. A partir de los 4 años, debemos cambiar el pienso por uno de gato adulto para evitarle problemas de riñón. Existen alimentos específicamente para hurones pero habría que observar con cuidado los ingredientes, ya que en ocasiones no es tan bueno como el de gato.
A la hora del baño no es recomendable bañarles más de 1 vez al mes, ya que se estimula la secreción de sus glándulas y provoca que huela más fuerte. Con el baño aprovecharemos para cortarles las uñas y limpiarle los oídos si presenta suciedad. Utilizaremos un shampoo para hurones, agua templada y toallas para secarlo, dependiendo del carácter del hurón se podrá usar el secador, controlando que el flujo de aire no sea caliente, ya que podríamos quemarle.
Para evitar enfermedades el hurón debe ser vacunado a partir de la 6ª semana de moquillo, serán 3 dosis cada 3 semanas/1 mes y después de forma anual, también debe ser vacunado de rabia, aunque depende de la comunidad donde residamos, ya que en algunas no es obligatoria. Cuando sean vacunados deben ser observados por si aparecen efectos secundarios.
Otros problemas de salud que puede afectar al hurón son: obstrucción intestinal, bolas de pelo, estrés por calor, sarna ótica, gusanos del corazón (filaria), fiebre del valle, cardiomiopatía, resfriado y gripe (como la de los humanos), enteritis, enfermedad de las glándulas suprarrenales, linfosarcoma, insulinoma, síndrome de Waardenburg, enfermedad de Lyme, enfermedad aleutiana, adenocarcinoma…solo menciono algunos, pero no quiere decir que nuestro hurón las vaya a contraer.