Muchas veces, los dueños de los perros, nos hemos vsto en situaciones algo complicadas cuando sacamos a nuestras mascotas a la calle. Si bien es cierto que la legislación es muy confusa y que en cada comunidad autónoma e incluso en cada ciudad hay una normativa diferente sobre la posibilidad de soltar o no a nuestros perros en los parques, lo cierto es que muchos de los dueños tampoco quieren socializar a su perro o perra, bien porque tienen miedo, bien porque no saben cómo hacerlo.
En cualquiera de los dos casos hay, por supuesto, un perjuicio para el animal, y en la mayoría de los casos, también para la persona responsable.
Es difícil ver cómo dos persnas mantienen la calma mientras sus perros se gruñen o "se pelean", en una comunicación que en la mayoría de las ocasiones sienta las bases de una posterior convivencia en paz. Cada cual se colocará en su lugar, y según esta jerarquía podrán establecer sus relaciones.
Nuestras mascotas necesitan oler, correr, socializarse, "discutir" o crear grandes lazos de amistad con otros animales, y eso no es posible conseguirlo con el continuo distanciamiento de éstas.
Si quieres que tu perro tenga una vida feliz, tiene que poder relacionarse con normalidad con los de su misma especie, y aprender también los límites naturales que entre ellos establecen. Un perro solitario será un gran compañero para una persona, pero si no le permites relacionarse con sus iguales, le estarás privando, precisamente, de su plena condición de perro y de sus conductas naturales.