Casi todos los amantes de los animales han soñado alguna vez con tener un caballo. Pero sólo el hecho de que sus cuidados son caros y que para tenerlo siempre cerca necesitarías tener también una gran finca hace que no todos puedan cumplir este sueño.
En este artículo de Mascotea vamos a acercarnos un poco a estos bellos y nobles animales y conocer cómo es su alimentación.
Lo primero que tenemos que saber es que no hay dos caballos iguales y que no se puede alimentar a todos de la misma manera. Su dieta dependerá de su tamaño, edad, raza, ejercicio que realiza, etc.
- Forraje o heno: se le debe proporcionar al caballo forraje todos los días. Aunque su estómago es pequeño, el intestino grueso es grande y su buen funcionamiento es muy importante para la salud del caballo y la fibra que contiene el forraje o heno le ayuda a ello. El heno es la alternativa al forraje si el caballo no dispone de campo o prado para pastar. El heno, para que sea bueno, no debe tener moho ni polvo.
- Grano o pienso: los caballos que necesiten energía extra, además de pastar se les puede proporcionar granos de cereales como avena, maíz o cebada.
- Grasa: fuente de energía. Presente en los alimentos específicos para ellos. Pero hay que tener especial cuidado si el caballo tiene tendencia a engordar.
- Proteínas: algunas proteínas son necesarias y proporcionan aminoácidos esenciales.
- Minerales: son muy importantes para la formación y mantenimiento de huesos y músculos. El pienso de calidad está formulado para cubrir las necesidades de los caballos.
- Vitaminas: como en nosotros los humanos, las vitaminas son muy importantes. Si tiene una correcta alimentación, no es necesario ningún tipo de suplemento vitamínico. Siempre que tengamos dudas de si nuestra mascota está bien alimentada hay que consultar antes a un veterinario y no medicarle por nuestra cuenta.
Para calcular la mejor dieta para este magnífico animal hay que conocer su peso. Para hacerlo de la forma más fiable es necesario una báscula profesional. También existen unas cintas de medir que se pueden comprar en tiendas especializadas. Un caballo necesita aproximadamente el 2% de su peso corporal en comida. Una forma rápida para saber que un caballo está en su peso ideal es pasarle la mano por el cuerpo y notar sus costillas, Ápero no verlas a primera vista!
Seis puntos básicos para una buena alimentación
- El alimento debe ser administrado en pequeñas cantidades, a lo largo del día y respetando las horas. ¡A los caballos les encanta la rutina a la hora de comer!
- Almacena el pienso y el forraje en un lugar fresco, seco y a ser posible en cubos cerrados para evitar el polvo, la humedad y otros pequeños animales amantes del heno como los roedores.
- Si quieres o necesitas realizar cambios en la alimentación de tu caballo, hazlo de forma gradual.
- Que tenga forraje a discreción: les entretiene y mantiene su intestino en perfecto funcionamiento.
- Deben tener agua fresca todo el día.
- Deja al caballo echarse la siesta después de comer. No debe hacer ejercicio al menos durante una hora.