Las fábricas de Cachorros, también denominadas "puppy farms" (granjas de cachorros), son lugares habitualmente ubicados en Europa del Este y E.E.U.U.
En España, se emitió un documental de E.E.U.U. el día 11/05/2013 a las 11:00 h en el canal cuatro (y que puedes ver al final de este artículo), dentro del programa de Cesar Millán (El encantador de perros) y se realizó un estudio, en el que cuentan como sobreviven los animales y como se encuentran en condiciones precarias, criando de forma abusiva y descontrolada, sin respetar el Reglamento Internacional de cría de perros, ni las normas que establece la Real Sociedad Canina de España (RSCE) donde dice, entre otras:
“Los reproductores, macho y hembra, tienen que estar entre las edades permitidas para la reproducción.
- Hembras más de 1 año y menos de 10 años cumplidos en el momento de la monta.
- Machos más de 9 meses y menos de 12 años cumplidos en el momento de la monta.”
Los animales se encuentran encerrados en jaulas mínimas, y cuando ya no sirven para la cría son sacrificados. Conocemos un caso de una perrita yorkshire que con tan sólo 3 años de edad, ya había tenido 6 camadas.
Los cachorros se separan de sus madres a muy temprana edad para ser exportados o importados.
Muchos de estos cachorros mueren antes de llegar a su destino por deshidratación, desnutrición o por diversas enfermedades que han contraído en sus lugares de nacimiento, debido a la masificación de perros y de cachorros.
Los cachorros que nacen en éstas “fabricas”, debido a la superpoblación, la falta de espacio, la escasa higiene y la asepsia, suelen desarrollar enfermedades infecto-contagiosas, ya que no se ha respetado el proceso de vacunación y desparasitación pertinente.
Los pocos supervivientes se venden en tiendas o por internet, a un precio muy económico.
Cuando adquieres un cachorro en éstas “fabricas” y enferma, debes de reclamarlo y cuando lo reclamas te dicen que lo sustituyen por otro igual y son sustituidos por otros cachorros de idénticas deficiencias sanitarias.
Es muy común en el ser humano, adquirir un cachorro a bajo precio y estar con él dos o tres días y tenerle mucho cariño; tan normal que hay personas que por proximidad o por economía, se compran un cachorro, procedente de estos criaderos-fábrica y cuando tienen en su casa al cachorrín, éste empieza a tener problemas de sociabilización, de conducta, de carácter y muchos de ellos están enfermos.
Con lo cual, al nuevo cuidador le supone un gasto extra de medicación, tratamiento, visitas veterinarias, etc... y en muchos casos desgraciados, el “puppy” ha fallecido en brazos de su cuidador.
Cualquier criador profesional, no ofrece un perro enfermo; ya que por el hecho de ser criadores profesionales, tienen un “número de identificación (afijo)” que garantiza las calidades y cualidades del cachorro.
Queremos aclarar: El que la ubicación habitual de estos macrocriaderos se encuentre en Europa del Este y algunos en E.E.U.U., no significa que no existan criadores profesionales en estos lugares, que los hay y de gran prestigio.
Sin garantías sanitarias
Existen muchos problemas de salud, con enfermedades tales como parvovirosis, moquillo, displasia, sordera, ceguera congénita, problemas de riñones, problemas circulatorios, etc.
Con problemas de conducta
Otro factor negativo a añadir son los problemas de conducta, pues al criar en situaciones de estrés, las madres no pueden educar correctamente a sus hijos, y además son separados a los 20 días.
Lo aconsejable es que un cachorro permanezca con su madre al menos hasta los dos meses de edad.
Al perder tempranamente la alimentación materna, el sistema inmitario no se desarrolla correctamente y la calidad de vida del cachorro se acorta.
Debido a todas estas circunstancias y a problemas genéticos como displasias o factores de comportamiento como la agresividad, es muy común, que los cachorros procedentes de éstos “criaderos” desarrollen problemas conductuales además del alto porcentaje de muertes en el seno de las nuevas familias
Adopta o compra a criadores responsables
- Los cachorros con pedigree español, tienen asignado un número de LOE.
- Los criadores profesionales permiten ver el criadero, los padres y los cachorros.
- Las entidades adoptantes facilitan garantías sanitarias del animal y realizan un contrato de adopción.
- Los cachorros se entregan desparasitados y al menos con la primera vacuna.
- Los criadores profesionales realizan una cría responsable, evitando enfermedades hereditarias.
Pongamos freno ya
Hay que poner freno a este tráfico incontrolado de cachorros, que no tienen culpa de ser utilizados, frustrando en muchos casos la ilusión de las familias que sólo buscan un peludito al que dar cariño.
Cuando compramos un perro de estas fábricas, no estamos salvándole la vida, estamos dejando una jaula libre para que entre otro cachorrito nuevo y un intermediario se beneficie de ello.
-POR FAVOR, DAD DIFUSIÓN A ESTE ARTÍCULO-