Pequeño Münsterländer

En nuestro recorrido por los cientos de razas de perros que existen, hoy nos fijamos en un precioso perro de caza con un nombre algo difícil de pronunciar: el Pequeño Münsterländer, Kleiner Münsterländer en alemán. Los amantes de la caza valoran de él su amplia versatilidad, ya que es capaz de dedicarse tanto a tareas de muestra (apunta a la pieza) como de cobro (lleva a la pieza abatida a las manos del cazador). Además, se comporta igual de bien en tramos secos y escarpados como en zonas húmedas, riberas de ríos o pantanos. Este inteligente perro de mirada vivaz debe su nombre a la ciudad donde comenzó a criarse, la cautivadora y tranquila Münster, en el norte de Alemania. No hay que confundir esta raza con otra que tiene un nombre similar: el Münsterländer Grande. Ambas razas tienen su origen en la misma región alemana, pero se desarrollaron a partir de razas de perro diferentes por lo que sus características físicas, genéticas y psicológicas son diferentes. Hoy vamos a centrarnos en descubrir al no tan pequeño gran cazador llamado Pequeño Münsterländer.

 

Descripción

Que no os despiste el nombre de "Pequeño"… este precioso perro cazador no es un "toy", es un ejemplar mediano con una complexión fuerte. Los expertos dicen de los Münster que son perros "aristocráticos": cabeza y posturas bien erguidas, cola larga y plana, cuerpo armónico y equilibrado… Veamos algunas de las características estándar de este precioso animal:

Cráneo plano ligeramente abovedado y bien proporcionado respecto al resto del cuerpo. Orejas anchas y caídas, bien pegadas a su cabeza. Hocico alargado y recto rematado por una simpática trufa de color marrón. Como es propio de las razas cazadoras, el Münster tiene mandíbulas y dientes grandes y fuertes, elementos imprescindibles para los momentos en que debe cobrar las piezas. Los ojos de este precioso perro de muestra llaman la atención por su peculiar brillo de inteligencia. Son de tamaño mediano, ni abultados ni hundidos, con párpados bien pegados al globo ocular. ¿Color? Un precioso tono avellana o un profundo marrón oscuro.

Cuerpo: El Pequeño Münsterländer tiene un pecho fuerte y bien musculado. Su lomo es ancho, bastante corto y presenta, también, buenos músculos especialmente en la zona vertebral. La cola es de tamaño mediano, ancha, de tonos marrones y con la punta habitualmente acabada en un penacho blanco.

Pelo: El Münster tiene el pelo normalmente liso o, en algunos casos, levemente ondulado (nunca rizado). Sus colores típicos son el marrón y el blanco. Una característica a destacar de su pelaje es que es impermeable, un rasgo positivo que hace de él un excelente compañero de caza en zonas húmedas.

Carácter: El Münsterländer es un perro de extremada inteligencia, alta capacidad de aprendizaje y muchas ganas de vivir. Ágil y lleno de vitalidad, este perro cazador necesita tener "objetivos" y trabajos que hacer. Correr, saltar, buscar… son actividades completamente necesarias para que mantenga una conducta estable y equilibrada.

Cuidados

El Pequeño Münsterländer necesita vivir con una persona o familia que disponga de tiempo para acompañarle en las horas de ejercicio que necesita. Es un perro simpático e inteligente que necesita actividad, retos constantes…. Y compañía. No se adapta nada bien a la soledad que, si se le impone, puede modificar su dulce carácter y hacer de él un "trasto" destructivo. Su pelo no requiere más cuidados que los de todas las mascotas de pelaje tupido y mediano: un buen cepillado dos o tres veces por semana y un baño mensual utilizando productos con un PH adecuado. Por su carácter deportivo, corredor y cazador, se aconseja revisar periódicamente sus orejas y ojos para prevenir la presencia de espigas, hierbas, objetos extraños…. Que puedan producir infecciones oculares u otitis. Dentro de los cuidados básicos de nuestro Pequeño Münsterländer no debemos olvidar la alimentación. Al tratarse de un perro vital necesita ingerir 320 gramos al día de alimento seco, completo y bien balanceado. No olvidemos poner a su alcance siempre agua fresca y abundante.

Enfermedades

Dentro del mundo de la Cría Canina, estos bellos ejemplares se han caracterizado por tener una selección muy cuidada y exigente. Así, no se han detectado enfermedades infecciosas hereditarias. Otra buena noticia es que no es propenso a sufrir la temible displasia de cadera de los perros cazadores.

Historia

EL origen de esta raza no está muy claro aunque la mayoría de los expertos lo sitúa a finales del siglo XIX, en 1870. Ese año, los alemanes estudiosos de la cinología (ciencia que estudia al perro de forma multidisciplinar) decidieron catalogar los cientos de razas de muestra que convivían en el país. Tras varios meses determinaron que el precioso perro que habían criado los aficionados del pueblo de Münster a partir del Spaniel Francés.

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