El atlético y sedoso gato de Angora lleva sumando adeptos en Europa desde hace más de 5 siglos. Su cuerpo estilizado y atlético, su precioso color y su carácter noble e inteligente, hacen de este precioso ejemplar uno de los preferidos por los amantes de los pequeños felinos.
Peso y tamaño
Pequeño - Mediano. Entre 3 y 5,5 kg.
Promedio de vida
12-16 años
Relación con los niños
Aceptable.
Relación con gatos
Buena.
Relación con perros
Aceptable.
Necesidades de mantenimiento
Compañía humana. Alimentación correcta. Cepillado diario.
Características principales
Afectuoso, elegante, fiel, tranquilo.
Número de crias
De 4 a 6 crías.
Enfermedades comunes
El gato de Angora es una raza que se ha ido depurando a lo largo de los años, con lo que no presenta enfermedades o afecciones de especial importancia excepto, quizá, la ingestión de bolas de pelo producto de su propia higiene diaria.
Descripción
Lo primero que nos llama la atención del sedoso gato de Angora es, sin duda, su elegancia al caminar. Este efecto de deslizamiento y sutileza lo provoca la mayor altitud de sus patas posteriores respecto a las anteriores y, también, el pequeño tamaño de sus almohadillas, bastante más reducido que el resto de las razas. A pesar de ser de tamaño pequeño, el gato de Angora no es nada frágil. Su cuerpo, aunque esbelto, es musculado y robusto rematado por una preciosa y muy peluda cola. Es un gato bien proporcionado, con una cabeza relativamente pequeña adornada con unos enormes ojos ovalados de brillante mirada. El color de los ojos varía, puede ser azul, cobre, ámbar… Una curiosidad: los ejemplares de color blanco pueden tener una mirada bicolor: un ojo azul y el otro ámbar. Las orejitas de este pequeño felino son picudas y su mentón es ligeramente ovalado. Como sabes, el manto del gato de Angora es largo y sedoso, con la particularidad de que carece de manto interior. Aunque el color más conocido del gato de Angora es el blanco también hay ejemplares de distintos colores, chocolate, vainilla, negro… pero no sabremos el color final de nuestro gatito hasta que cumpla el año y medio o los dos años de edad. En cuanto a su carácter podríamos decir que el gato de Angora es una mascota bastante tranquila aunque juguetona, tanto de cachorro como de adulto. No le suele gustar salir demasiado de casa y siempre encontrará un lugar calentito cerca de uno de los miembros de su familia humana.
Cuidados
El gato de Angora es un animal fuerte y con una esperanza de vida muy prolongada siempre y cuando se cubran sus necesidades básicas: alimentación equilibrada, agua fresca, cepillado diario, vacunas periódicas, ejercicio adecuado a su constitución física y edad y, por supuesto, mucho cariño.
Higiene: Como tiene el pelo bastante largo, lo más recomendable es dedicar unos minutos al día a cepillarlo. Además de conseguir que nuestro gato luzca mejor su precioso manto, el cepillado eliminará gran parte del pelo muerto que puede pasar a su aparato digestivo (las famosas bolas de pelo).
Alimentación: El gato de Angora es bastante tranquilo por lo que la alimentación que le demos a diario no debe ser demasiado copiosa ni tampoco excesivamente rica en grasas y proteínas.
Prevención: Como otras razas de gato que ya hemos visto en Mascotea - como el American Curl o el Russian Blue - el gato de Angora no es un gato enfermizo. Lógicamente esto no quiere decir que no tengamos que administrarle las vacunas recomendadas anuales y descuidar su buen estado de forma física.
Por su naturaleza resistente, los gatos de Angora no son especialmente sensibles a sufrir enfermedades congénitas. No obstante, uno de sus rasgos físicos más bellos puede darles ciertos problemas: su largo pelaje que hace que pueda tragar tupidas bolas de pelo. Normalmente estas bolas son expulsadas normalmente por el propio gato, en raras ocasiones exige cirugía.
Historia
La creencia general es que el gato de Angora proviene de una región turca localizada a las orillas del Lago de Van. Su nombre proviene del de la antigua capital de esta región - Angora - que ahora recibe el nombre de Ankara. Parece ser que este precioso gato fue llevado por mercantes turcos a Europa a mediados del siglo XVI. Su largo y sedoso manto, unido a la limpieza de sus ojos y su excelente carácter hicieron que esta raza se popularizara rápidamente. Hoy por hoy el gato de Angora está distribuido por prácticamente el mundo entero y sigue siendo una de las razas favoritas de niños y mayores.