Hace unos días corría un rumor esperanzador para todos lo amantes de los animales pues parecía que se pretendía prohibir la venta de perros y gatos en tiendas de animales. Una noticia muy positiva sobre todo para aquellos que son conscientes de que el negocio de la compra venta de animales no esconde más que serios perjuicios para nuestros más fieles amigos, en muchos casos abusos y condiciones de vida denigrantes para ellos.
Por supuesto, el tema del abandono es una auténtica lacra en nuestro país y también está relacionado con ello por lo que se pondría solución a muchos problemas que mejorarían notablemente la vida de los peludos otorgándoles una vida un poco más digna.
No se prohibirá la venta de animales en tiendas de mascotas
El espejismo ha durado poco tiempo. El Gobierno ya se ha encargado de desmentir la noticia explicando que no se prohibirá la venta de animales en tiendas de mascotas ni su exhibición a través de las indeseables peceras y escaparates. Según parece lo que hará el Gobierno será regular el sector a través de la tenencia responsable de las personas.
La ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García-Tejerina, así ha confirmado que se impondrán unas normas a la hora de adquirir un animal con el objetivo de que se haga de una forma responsable lejos de las compras compulsivas y así evitar el enorme problema de abandono en nuestro país que se estima en 120.000 animales abandonados en tan sólo un año. Increíble pero cierto.
Además, ha afirmado que lo que se busca es que los animales no sufran y se les otorgue unas condiciones de vida acordes a las que la sociedad solicita para ellos. Y es que cada vez somos más los que abrimos los ojos y reclamamos derechos para los animales. La unión hace la fuerza y poco a poco se van considerando aspectos importantes en la lucha con el maltrato animal.
El anteproyecto de ley podría regular las condiciones de vida de los animales, pudiéndose evitar la separación de los cachorros de sus madres a las edades tan tempranas a las que son separados así como evitar su compra compulsiva y su posterior abandono. Además, se evitarían las condiciones de venta actuales en las que los animales permanecen en jaulas con un espacio muy reducido, sin apenas poder moverse y sin relacionarse con otros perros, algo que influye negativamente en el proceso de socialización en la que la mayoría de los cachorros se encuentra en el momento de su venta.
Parece ser que se dará un pequeño paso más. Si será firme o no, aún está por ver. Lo que está claro es que tarde o temprano dejarán de ser tratados como meros objetos gracias a la lucha de todas esas personas unidas que hay detrás y que trabajan día a día por conseguirles unos derechos mínimos.
