Quizá conozcáis la leyenda de Balto, el perro esquimal, gracias a numerosos libros y cuentos infantiles que se han escrito sobre ese héroe canino. Pero fuera de la ficción, la historia de Balto fue un hecho real, que incluso posee una estatua conmemorativa en el centro de Nueva York. Y es solo uno de los muchos ejemplos de lo que los perros de trineo han ayudado a la humanidad a lo largo de la historia.
Los perros de trineo son canes capaces de soportar las condiciones extremas que presentan las zonas nórdicas. Perros entrenados desde hace milenios para transportar tanto personas como mercancias a través de zonas nevadas y heladas. En un principio fueron descendientes cercanos de los lobos de las regiones nórdicas y polares. Poco a poco se fueron creando mezclas con perros, para dar lugar a las numerosísimas razas de estos perros con las que contamos hoy en día.
En los países donde la nieve es la gran protagonista, estos perros han sido siempre auténticos tesoros alrededor de los cuales se fundamentaba su estilo de vida. Los esquimales fueron los pioneros en el uso de estos perros, se cree que ya era algo habitual incluso en el año 1000 AC, convirtiéndose en uno de los medios de transporte más antiguos del planeta. En el siglo XVII los exploradores del ártico también utilizaron perros de trineo para sus estudios. Y aunque en el 1920 se empezaron a utilizar otros medios de transporte más modernos, tan solo 5 años más tarde se demostró su importancia, ya que en Alaska, ante un brote de difteria, resultaron vitales al transportar el suero que salvaría cientos de vidas. Ningún otro transporte más moderno fue útil para ese encargo, solo esos grandes héroes caninos lo consiguieron. Como siempre, ¡ayudando al ser humano!
Hoy en día su uso sigue siendo habitual en muchas regiones del planeta. Además, existen las carreras de trineos donde compiten por ser el mejor, tanto en carreras cortas de velocidad como en grandes competiciones que atraviesan cientos de kilómetros en condiciones muy duras. En esos casos, es básica la coordinación entre el "musher", o conductor del trineo, y sus perros, creando vínculos realmente fuertes que convierten el "mushing" en toda una experiencia.
Razas de perros de trineo
Como ya hemos dicho, las razas de estos perros nórdicos nacieron de la base de lobos del ártico, por lo que aún conservan algunas de sus características en cuanto a rasgos. Son perros que poseen unas patas fuertes y bastante anchas en la palma por lo general, para mejorar la adherencia en la nieve. Además, suelen poseer un pelaje muy denso, tanto largo como corto, que les impide que el frio les llegue a la piel y poder aguantar más las bajas temperaturas.
Eso sí, no creáis que solo los encontraremos en el ártico. Hoy en día estas razas de perros podemos encontrarlas en casi cualquier rincón del mundo, donde se han ido adaptando a vivir a nuestro lado.
La FCI solo reconoce 4 razas como perros de trineo propiamente dichas, que son:
- Husky Siberiano: como su nombre indica, son originarios de Siberia. Les encanta explorar, curiosear por todos lados, lo que les convierte en unos acompañantes de viaje excepcionales. Además son sociables y confiados, aunque guardan de el lobo su independencia.
- Samoyedo: este perro de gran pelaje blanco es conocido por ser un gran perro de trabajo ruso y por su carita siempre sonriente, ya que parece que siempre tengan esa expersion en la cara. Son bastante tozudos, por lo que el entrenamiento para convertirlo en perro de trineo suele ser bastante laborioso.
- Perro de Groenlandia: esta raza quizá es una de las que más paralelismos guarda aún con sus antepasados lobos. Tiene una característica muy típica y es que no ladra, sino que aúlla. Posee una fortaleza física que le hace inigualable en las condiciones más extremas. Son muy inteligentes, ¡y bastante tozudos e independientes también!
- Alaskan Malamute: otro de los grandes conocidos de los perros nórdicos. Estos grandes perros que parecen peluches por su largo pelaje, son uno de los perros más antiguos como perros de trineo, lo que les convierte en los protagonistas por excelencia de este medio de transporte. Son fuertes, resistentes, capaces de llevar grandes pesos, y podeen una valentia y coraje que les hace seguir adelante aunque las condiciones sean nefastas.
Aparte de las reconocidas, existen otras tantas como el chinook, el perro esquimal canadiense, el eurohound, y un largo etcétera que también son habituales como perros de trineo. Lo importante y fundamental es que sean perros fuertes y aclimatados al frío, por lo que si estas pensando apuntar a tu chihuahua a una carrera de mushing, ¡mejor vete olvidando de hacerlo! :)