¡¡Hoy ha venido a verme el tito Javi!!

Hacía mucho que no le veía, desde que me fui con mama en el coche. Me ha traído regalos y dos huesos. ¡Y nos hemos divertido mucho!Cuando he s

alido al parque esta noche, he vuelto a ver a Simba, y a Truco, y a un montón de amigos más. Todos los humanos me dicen cosas bonitas aunque a veces los perros me dan algún revolcón. ¡Pero ya corro a su lado y casi parezco una de ellos!

En casa siguen sin dejarme jugar con Remo, y cuando quiero cogerle con la boca o que desaparezcas esas orejotas que tiene, me echan la bronca. ¡Yo sólo quiero jugar! Sólo se acerca cuando estoy dormida...Mis amos se pasan mucho tiempo sentados en el mismo sitio sin moverse, y cada vez que quiero jugar con ellos, que les cedo mi hueso para que me hagan caso o me subo a la silla para que me acaricien, me regañan. Luego de repente todo es distinto y me cogen en sus brazos, me hacen mimos y jugamos todos. No sé muy bien por qué a veces sí, y a veces no...Pero hoy algo he debido hacer muy mal, porque después de venir del parque me han metido a un rectángulo donde me resbalaba si quería salir, y me han echado agua durante mucho tiempo, frotándome con una cosa que olía... rara. No me disgusta el olor, ¡pero no soporto estar mojada! Y eso que he tenido un patito de goma bañándose conmigo...

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